Se suele afirmar que los datos no son la información y que la información no es conocimiento. Y es cierto. Pero también es verdad que para llegar al conocimiento hay que pasar por los datos.

Seguramente, con esta idea se lanzó hace 5 años el European Union Building Stock Observatory. Se trata de un instrumento cuya finalidad es proporcionar una mejor comprensión del estado y del comportamiento energético del sector de la construcción en Europa a través de datos fiables y comparables.

Un parque muy antiguo

Estos datos convenientemente estructurados (información) y comprendidos (conocimiento) sirven de base para políticas orientadas a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Esto sirve para cumplir con los compromisos climáticos, para efectuar inversiones en el sector de la construcción y de la rehabilitación, o para que los investigadores de distintas disciplinas puedan estudiar una realidad social muy relevante como es la edificación.

En la Unión Europea (UE) hay unos 131 millones de edificios. Un total de 119 millones son residenciales y el resto tiene otros usos (industriales, comerciales, servicios e infraestructuras). España posee unos 10 millones de inmuebles del primer tipo, solo por detrás de Alemania, Francia y el Reino Unido  (son datos pre Brexit).

La dimensión del parque edificado es de por sí interesante, pero todavía lo es más tener una visión de conjunto su comportamiento energético. Un dato significativo en este sentido es que el 42% de los edificios residenciales y un 38% de los no residenciales en la Unión Europea fueron construidos antes de 1970, es decir, antes de la adopción de medidas de eficiencia energética de ningún tipo. Lo cual no significa, claro está, que todos los edificios construidos en el últimos medio siglo hayan adoptado necesariamente este tipo de medidas.

Fórmula 3 en 1

El European Union Building Stock Observatory es tres cosas a la vez: una base de datos, un datamapper y un factsheet.

Empecemos por la base de datos. Esta base está alimentada por 250 indicadores que se organizan en 10 áreas temáticas: características del parque edificiado; rendimiento de la envolvente del edificio; sistemas técnicos de construcción; edificios de consumo casi nulo; renovación de edificios; consumo de energía; certificaciones; financiación; pobreza energética; y mercado de la energía.

Cada una de estas áreas se despliega además en subtemas, lo que permite llegar a datos muy precisos como el uso de energía en las cocinas o el uso por metro cuadrado, por poner solo dos ejemplos.

Los conjuntos de datos puede ser consultados por tema, por año, por país y por todo el ámbito de la UE. Los datos solicitados de presentan en tablas y gráficos. con sus correspondientes fuentes, que son múltiples y que proceden tanto de la propia UE y de las estadísticas de los estados miembros, como de proveedores privados de datos.

El data mapper es una manera de acceder a la información sobre un mapa dinámico donde aparecen claramente marcados los estados miembros.

Y, finalmente, el factsheet o factsheets (de hecho, son varios)  presentan los datos e indicadores, por país o por temática,  en relación con la aplicación de la legislación comunitaria vigente como la Directiva 2010/31/UE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 19 de mayo de 2010 , relativa a la eficiencia energética de los edificios o la Directiva de eficiencia energética También incluyen estadísticas clave, análisis y contexto político de cada estado miembro.

Ventajas indiscutibles

El European Union Building Stock Observatory fue concebido para solucionar un problema persistente en la UE como era la falta de datos fiables y coherentes sobre el parque inmobiliario. Quizás el Observatorio no sea una solución definitiva a este problema: cabe recordar que sus prestaciones dependen de la calidad de los datos de las distintas fuentes que le alimentan y, esta no es homogénea en todos los estados miembros. Pero no es menos cierto su propia existencia constituye de por sí un avance.

Otro aspecto destacable del Observatorio es que, al ayudar a las políticas e inversiones en eficiencia energética, está potenciando con ello unas de las estrategias más relevantes en la lucha contra el cambio climático como es la eficiencia en el uso de la energía.

 El reconocimiento de la eficiencia en este cometido está cobrando cada vez más relevancia. El World Economic Forum, en su página web, y en concreto en los contenidos dedicados a la COP 26 de Glasgow celebrada el pasado noviembre, habla de la eficiencia energética como el “héroe anónimo” en esta lucha.  Además, señala que “la eficiencia es difícil de visualizar, medir, agregar, incentivar y legislar, pero su impacto puede ser inmenso”.

El papel crucial del aislamiento

Según el World Economic Forum, la evolución de la tecnología digital juega a favor de la eficiencia a través de la optimización de procesos con la sensorización. Sin embargo también apunta que “la forma más básica de eficiencia pasa por el aislamiento” que permite reducir la pérdida de energía y confort térmico en edificios residenciales y de todo tipo. Los datos reunidos por el  European Union Building Stock Observatory, son cruciales para seguir este camino.

Los datos del Observatorio han sido utilizados para la realización del informe Achieving the Cost-effective Energy Transformation of Europe’s Buildings. Este documento de referencia trata de dar respuesta a la pregunta: ¿cuáles son las formas más rentables de descarbonizar el actual sector de la construcción de la UE mediante renovaciones energéticas? Su respuesta consiste en  proporcionar un método y un conjunto de datos para saber el nivel de coste óptimo de las medidas de eficiencia energética en combinación con soluciones de calefacción y refrigeración bajas en carbono.  El método utiliza los principios básicos del análisis de costes y beneficios (CBA).

Es solo un ejemplo de que los datos, efectivamente, son una autopista hacia el conocimiento.